Bruselas.– El tráfico de cocaína en Europa alcanzó niveles históricos en 2023, sin señales de desaceleración. Así lo advierte el nuevo informe anual de la Agencia de la Unión Europea sobre Drogas (EUDA), que será presentado oficialmente este jueves en Lisboa.
Por séptimo año consecutivo, las incautaciones de cocaína aumentaron significativamente: 419 toneladas fueron confiscadas, un salto notable frente a las 323 toneladas de 2022.
¿Dónde entra más cocaína a Europa?
Bélgica lidera como principal punto de entrada, con 123 toneladas decomisadas.
Le siguen España (118 toneladas) y Países Bajos (59 toneladas).
Otros países como Alemania (43 t), Francia (23 t) y Portugal (22 t) también comienzan a jugar un papel importante en el mapa del narcotráfico.
Riesgo en aumento: salud, violencia y crimen
Según la EUDA, la disponibilidad de cocaína va en aumento, lo que eleva los niveles de consumo y sus impactos en la salud pública. Además, la violencia y la criminalidad asociadas a este mercado ilícito representan una creciente amenaza para la seguridad en los Estados miembros.
"El tráfico de cocaína no ha tocado techo. La presión sobre las autoridades y las comunidades seguirá creciendo", alerta el informe.