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La joven cantante Majo Aguilar demostró que su carrera como exponente de la música mexicana ni es sólo un paso fugaz, por el contrario, está labrando con fuerza su nombre.
Noche de sábado 7 de junio, el primer Teatro Metropólitan de su carrera y de entrada hay ambiente de alegría, la buena energía se percibe en el ambiente.
Se apagan las luces y ella sale con su traje de 'charro galáctico', como ella describe a su vestimenta en tono blanco y plata, haciendo honor a la elegancia de la música vernácula.
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Majo recorre el escenario como si flotara, derrochando a la vez una sensualidad fina que hasta las asistentes femeninas lo reconocen con gritos de "hermosa".
Durante el espectáculo, la joven Aguilar hace gala de tres cambios de imagen, uno de ellos en rojo pasión, como la que siente por la música ranchera que fusiona con sus gustos del sonido belicoso y hasta el rock. De ahí que su repertorio sea una combinación de temas inéditos, clásicos de lo vernáculos y versiones de éxitos del pop y rock al del mariachi.
Así en su espectáculo se pudo escuchar temas como 'Tómbola', 'Tu cárcel' con Vivir Quintana, 'Bailar Contigo' a dueto con Pipe Bueno, 'Piel Azteca’, ‘Eres', éxito de Café Tacvba en mariachi y no podía faltar el acompañamiento de su papá Antonio Aguilar Jr., entre otras, con quien cantó 'Puño de tierra' y para demostrar que en su show sí se canta, y no se le va el aire y se pone a llorar como otras intentos de vocalistas, interpretó a viva voz el clásico Paloma Negra.

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Noche de alegría donde Majo cumplió 31 años, donde los asistentes aplaudieron, se pararon de pie cuando cantó 'a capela' y hasta los seguidores le cantaron Las Mañanitas en todo el Teatro Metropólitan.
Ella estuvo atenta hasta en ciertos detalles técnicos para que sus fans siempre tuvieran la mejor visión del espectáculo. Desbordante de esa alegría que contagia, ella no olvidó ni a las personas que estaban en los lugares más lejanos de la parte superior.
Ella, como pocos intérpretes lo han hecho, se acercó, saludó en el segundo piso del teatro, y sus fans le pedían subir hasta el lugar más recóndito, y ella lo hizo. ¿Es el buen augurio de lo que viene en su carrera, estar en la cima? Por lo pronto, a disfrutar de lo vivido que hay Majo Aguilar para rato.
