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De forma tajante, Ivonne Montero dijo que no practica la santería y mucho menos hace brujería: “Sólo conjuros de amor”, aclaró la actriz.
Todo inició cuando Montero fue vista hace unos días con un acompañante inusual en su auto: una calavera colocada en el asiento del copiloto. Esto desató inmediatamente una serie de rumores de que estaba metida en la santería y era una orisha (espíritus o deidades).
“Mira, no tiene nada que ver que sea una calavera, a mí me encantan las calaveras y ya lo saben. No tiene nada que ver con la Santa Muerte porque siempre me lo dicen. Yo la puse porque necesitaba sentir que alguien me acompañaba porque luego ando sola”.
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La verdadera razón detrás de la presencia de la calavera en su vehículo resulta ser un ingenioso –y un tanto peculiar– método de autoprotección. Montero explicó que, ante la inseguridad que prevalece en el país, decidió usar la calavera como un elemento disuasivo para posibles asaltos o situaciones incómodas para ella.
Se trata, en realidad, de una máscara de Halloween reutilizada. Como ella misma declaró: “Tenía una máscara de Halloween y sin querer sí ha resultado. A veces estoy en un alto, se acerca alguien y se va... la verdad es que sí impone. Siempre le pongo su cinturón de seguridad para que sea más creíble. No tiene nombre... sí se alcanza a percibir que alguien viene conmigo”.
Hace unas semanas, la actriz confesó que ha tenido encuentros con seres malignos que han querido abusar de ella y es por eso que se le relacionó con la brujería.
Pero, como se mencionaba, no ha sido la única experiencia paranormal que la protagonista de la telenovela ‘La loba’ haya vivido.
“No es una sola entidad porque he escuchado voces de niños; he visto niños chiquitos en mi casa. Mi hija, en una ocasión, vio un hombre subiendo las escaleras. Estaba chiquita y me dijo: ‘mami, vi un hombre subiendo las escaleras’”.
