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Hace casi una semana se estrenó el live action de Lilo y Stitch, y todo parece indicar que será uno de los más exitosos de Disney. Sin embargo, surge la pregunta: ¿vale la pena verla en el cine?
Existen dos perspectivas que vale la pena considerar: la de un adulto que espera revivir una película que marcó su infancia, y la de las nuevas generaciones que están conociendo por primera vez a estos entrañables personajes.
¿Vale la pena ver el live action de Lilo y Stitch?
Originalmente, esta nueva versión estaba pensada para estrenarse exclusivamente en Disney+ debido al limitado presupuesto con el que contó. Sin embargo, finalmente se decidió llevarla a los cines, y si eres muy detallista, podrías notar algunas limitaciones… comenzando por la ausencia de Gantu, el alienígena enviado por La Gran Consejal para capturar a Stitch.
Aun con esa omisión, la película logra construir una historia entretenida, emotiva y, en varios momentos, conmovedora. No es difícil que te saque una que otra lágrima.
Si estás pensando en llevar al cine a tu hermanito(a) o a tus hijos, te lo recomiendo ampliamente. Ellos no notarán la falta de Gantu y disfrutarán de la película tanto como tú lo hiciste en 2002, cuando se estrenó la original.
Ahora bien, si planeas ir sin la compañía de un niño(a), también vale la pena. La película cumple con lo más importante: transmite una fuerte dosis de nostalgia. Y créeme, al menos una lágrima se te escapará.
Según Rotten Tomatoes, sitio que se encarga de evaluar la popularidad y calidad de las películas, el live action de Lilo y Stitch es calificado con 69% en el tomatometer (porcentaje de críticas profesionales que ha recibido la película), sin embargo, esta plataforma cuenta con el popcornmeter que es la evaluacioón que el público da, este popcornmeter cuenta con una evaluación del 93%, por cada 100 personas 93 han amado la película.
